LA TRAGEDIA DE AVISPONES

 

-La noche del 26 y madrugada del 27 de septiembre el club Avispones de Chilpancingo vivió uno de sus días más tristes en su historia.

El 26 de septiembre la tragedia quedó marcada para el club Avispones de Chilpancingo, aquella noche el calendario de la liga TDP marcó la jornada 1 para jugar de visitante ante Iguala FC en el arranque de la temporada 2014-2105.

La ida a Iguala inició para Avispones a la una de la tarde cuando salieron de la capital, en su trayecto pasaron a comer en Zumpango, siguieron su camino a tierras “Tamarinderas” para llegar a las 6:00 p.m. donde estuvieron esperando el inicio, se tomaron fotos, hicieron ejercicios de calentamiento en la cancha 2 de la UDI “Urbano Delgado Castañeda” para afrontar su partido el cual ganaron 3-1.

Esa noche del 26 de septiemnre ganaron 3-1 ante Iguala.

Culminado todo se cambiaron y esperaron afuera de los vestidores los registros, así como la cedula del cotejo, en lo que terminaban ya habían planeado ir a cenar al centro de Iguala, en eso que estaban acordando alguien les aviso que mejor se retiraran para Chilpancingo ya que en el centro estaba fea la situación ya que acaban de balacear unos autobuses.

Tomaron la dirección rumbo a la Chilpancingo y cuando llegaron al puente cerca de donde está el palacio de justicia fueron detenidos por la policía un lapso de media hora hasta que los dejaron seguir su camino entre las 11:15 p.m., al ir transitando por la carretera federal Iguala-Chilpancigo en el tramo que da para el poblado de Santa Teresa vieron un taxi atravesado en la carretera.

Los jugadores observaron por sus ventanas que en el suelo estaba tirada una señora, el taxi se encontraba abierto de sus puertas y más adelante estaba otro carro que después se supo venia cargado con fruta. Siguieron su camino para que metros adelante les dispararon con armas de fuego de izquierda, derecha y de frente, al pasar esta situación rápido se metieron bajo los asientos para resguardarse de las balas.

El autobús de repente se salió de la carretera y quedó justo en el crucero que da hacia la población de Santa Teresa, al quedarse en ese lugar las personas que dispararon se bajaron de sus vehículos para intentar ingresar al autobús, al insistirse encontraron que la puerta estaba atorada, el chofer apretó el botón, pero esta no se abrió.

Así que el autobus donde viajaban tras el atentado sufrido aquella noche. 

Ante la insistencia de querer entrar y no poder hacerlo el auxiliar Jorge León se levantó y gritó “nosotros no somos estudiantes, somos futbolistas de Avispones”, al escuchar esto comentaron entre ellos y se retiraron del lugar tirando otra ráfaga de balas sobre las ventanas.

Tras esto los jugadores y cuerpo técnico corrieron a esconderse en los matorrales, aquí se mantuvieron aproximadamente hora y media, decidieron salir ya que comenzaron a llegar ambulancias, militares y ministeriales en apoyo.

Al llegar donde había sucedido todo su compañero Josué David “el zurdito” García Evangelista ya había fallecido, el chofer Víctor Manuel Lugo se encontraba con vida todavía, pero transcurrió poco tiempo y se desvaneció donde perdió la vida, otros heridos fueron el técnico Pedro Rentería, Jorge León, los jugadores Miguel Ríos, Leo Fonz, Omar Ornelas y Carlos Adame Flores conocido por la afición como el “Pañañas” seguidor del equipo.

El equipo se recuperó y luego del percance regresó a la actividad recordando al "Zurdito" en cada partido.

Tras ser auxiliados los jugadores se dividieron en dos grupos, unos fueron llevados al hospital general para acompañar a sus compañeros heridos y otros a las oficinas de la ministerial para hacer su declaración ante lo sucedido, en ese lapso aproximadamente entre las 4:00 y 5:00 a.m. llegaron los estudiantes de la normal “Raúl Isidro Burgos” buscando a sus compañeros, gritaron sus consignas, pero al no encontrar respuesta se retiraron.

Estudiantes llegarón a las oficinas de la ministerial para buscar a sus compañeros mientras algunos integrantes de Avispones hacían su declaración. (Imagen serie publicada en la plataforma Max).

Los jugadores estuvieron en las oficinas hasta las 9:00 a.m. Mario Moreno Arcos presidente municipal de Chilpancingo mando transporte para que pudieran regresar, en todo el camino fueron escoltados por dos patrullas. A 10 años de aquel suceso la herida sigue abierta en ese grupo de jugadores que vivió una noche trágica que jamás olvidaran.

Testimonios jugadores de Avispones de Chilpancingo que estuvieron en esa ocasión.